El parque se resiste al paso del tiempo y a la ausencia de la familia Hileret, quien levantó en Santa Ana uno de los ingenios más grandes de Sudamérica. Es un lugar donde aún pueden apreciarse las maravillosas especies autóctonas y del otro lado del mundo, dispuestas sabiamente por el famoso paisajista francés Carlos Tahys, el mismo que diseñó el Parque 9 de Julio en San Miguel de Tucumán.
A 117 años de su creación, las tareas por recuperar y revalorizar este espacio cultural e histórico son arduas. Por este motivo, este miércoles se concretó un importante paso en ese sentido, la Comisión «Salvemos el Parque» entregó el relevamiento arbóreo del Parque de Santa Ana. El informe fue realizado por la Fundación Forestar junto a vecinos, docentes y alumnos de la Escuela Agrotécnica Juan Mantovani y en él se determina la cantidad y variedad de especies presentes y el estado sanitario de cada ejemplar.
Vamos arbitrar las medidas necesarias para que este lugar se convierta en un espacio que pueda ser aprovechado por toda la comunidad y que, a su vez, también sea un atractivo turístico, puesto que su riqueza natural y cultural hace que tenga muchísimo potencial. El turismo sustentable es una de las tendencias mundiales y Tucumán no está ajeno a esto, muestra de ello es la ley que impulsamos para que se cree el sendero Huella del Aconquija; este parque podría ser parte integrante del mismo convirtiéndose así en uno de los destinos del senderismo.
