Entre algunos puntos importantes, el Código brinda agilidad en los procesos, lo que permite la resolución de controversias y el dictado de sentencias judiciales en plazos razonables, a la vez que incorpora nuevos institutos procesales.
En esta nueva redacción priman los principios de oralidad, inmediación, cooperación procesal y flexibilidad, a la vez que se le da sustento normativo a las tecnologías de la información, modernizando nuestro sistema judicial.
Se trata de un Código esencialmente local y resultado del esfuerzo y cooperación entre los poderes estatales, instituciones intermedias y destacados juristas tucumanos.