Con mucha emoción, junto a familiares y amigos, valoramos y reconocemos el legado de Hernán Córdoba, joven deportista que con su ejemplo de vida y compromiso, hizo realidad la creación del equipo para personas amputadas «Los Leones» y la Fundación de Futbol Amputados Tucumán.
Hernán entendió que la adversidad no podría detenerlo. En 2015, tras sufrir una amputación a causa de su cáncer, su espíritu de gladiador lo llevó a jugar en Los Teros, en Córdoba, y más tarde a formar parte del Seleccionado Argentino de Fútbol Amputado.
Hoy hacemos este reconocimiento post mortem a Hernán Córdoba, quien no solo fue un jugador de fútbol, convencido de la importancia que tiene el deporte para la inclusión, sino que también fue un campeón de la vida que continúa inspirando a muchas personas a través de su legado.