El gobernador citó al Papá Francisco respecto a la necesidad de promover la cultura del encuentro y privilegiar el diálogo en búsqueda de consensos, nos invita a «generar puentes dónde hay grietas y construir puertas dónde hay murallas». El mismo Manzur que hoy sostiene que hay que apostar por el diálogo es el que hace días, en un sincericidio, mostró la verdadera cara de su gobierno diciendo que «hace lo que quiere». Desafortunada forma de pensar, que denota por qué los tucumanos vivimos como vivimos, con un grave déficit en materia de infraestructura y alarmantes niveles de inseguridad que se hacen patente en los reclamos de la ciudadanía que solicitan respuestas urgentes ante estas problemáticas.