El origen de la imagen de la Inmaculada Concepción se remonta a los tiempos de la colonia y seguramente fue traída a estas tierras por algún conquistador o misionero, con la intención de erigirle una capilla en su honor.
El hallazgo de la Virgen atrajo la devoción de los fieles y en seguida la población, que con el tiempo fue conocida como Concepción de la Ramada, se colocó bajo su patronazgo y protección.
El pueblo tiene hacia Ella una profunda devoción. Es considerada Madre y Protectora, como el eslabón de oro que une el presente y el pasado de nuestra ciudad.
¡Felicidades Concepción, celebremos juntos a nuestra Madre!