Junto a referentes de distintos sectores representativos de la sociedad tales como el político, gremial, comercial, de los colegios profesionales y la industria, participamos del II Desayuno del Bicentenario por el Bien Común y la Amistad Social. Fue un evento positivo, una muy buena iniciativa de Monseñor Jose María Rossi, en el que tuvimos la oportunidad de reflexionar sobre diferentes temáticas que hacen a nuestra realidad y que constituyen grandes desafíos a enfrentar.
En el evento suscribí el Acta Compromiso «Una casa fraterna y solidaria» en la que coincidimos en la necesidad de construir una cultura del encuentro como camino indispensable para la construcción del bien común y en diez puntos fundamentales e irrenunciables en materia de políticas públicas: lucha contra la corrupción; combate contra el narcotráfico; prevención de las adicciones; impulso a la educación integral; acceso universal a la salud y al agua potable; generación de empleo digno; erradicación de la trata de personas y protección de la vida; promover el cuidado del ambiente; trabajar por la cultura del encuentro; lucha contra la corrupción y la impunidad.
De esta manera, renuevo los compromisos asumidos, aquellos que siempre han guiado mi accionar, continuar trabajando para cambiar la sociedad en aras de bienestar de todas las personas que la componen.
