Es una alegría poder festejar un nuevo aniversario junto a todos los vecinos. Se cumplen 116 años de la municipalización de mi querido Concepción, los invito a leer una reflexión para este día.
La política dedicada al ser humano y a la búsqueda de su bienestar se encontrara la respuesta a la falta de oportunidades que tiene nuestra gente en todas sus edades.
Es una necesidad partir de la participación, del debate, las propuestas, la priorización del Bien Común, también con las debidas demandas, con transparencia y sobre todo con proyectos propios y compartidos, todos juntos podemos contribuir significativamente al logro del desarrollo y bienestar que todos queremos para los habitantes de nuestro municipio.
Valoramos la democracia representativa, pero los tiempos actuales exigen mayor participación, es una buena oportunidad para trabajar juntos tras un objetivo de grandeza común, por una ciudad desarrollada, pujante y que no pare de crecer. Para escribir una nueva historia te invito a involucrarte y para concluir mi mensaje es propicio recordar las palabras de Teressa de Azpiazu «… de peligro de muerte son la indiferencia, el egoísmo, la falta de ideales, porque pueblo que tiene su sensibilidad adormecida, pueblo que no siente, pueblo que no cree, pueblo que no sabe, pueblo que no se agita, ni se conmueve, ni se entusiasma, ni confía, ni lucha, ni protesta, ni se defiende; pueblo que no se esfuerza en hacerse mejor… es pueblo próximo a la muerte».