El Cristo Bendicente fue encargado por el Gobierno de Tucumán en 1938 y fue emplazado en el cerro San Javier en 1942.
«Gloria a Dios en las alturas y paz a los hombres de buena voluntad», es la frase que esta grabada en la base de la estructura. Un llamado a los hombres del Mundo a rezar por la reconciliación.
Comparto más fotos de lo que fue un evento emotivo, la revalorización de esta gran obra.