Un 9 de Julio distinto sin carteles de políticos ni partidarios, con los
colores de nuestra patria, que ornamentan los festejos del Bicentenario y un mensaje que nos invita a construir los próximos 100 años, seamos protagonistas:
«Los ciudadanos de 1816 no eran superhombres. Seguro tuvieron miedo y angustia, pero el coraje y la convicción fue más fuerte. Y tuvieron la decisión de ser protagonistas de su futuro». MM